Debemos aceptar que al pasar más tiempo en el trabajo que en cualquier otro lugar, aquellas personas que comenzaron siendo tus compañeros de trabajo han llegado a ser tus amigos. Dentro de una empresa, tener un buen ambiente de trabajo ayuda a ser un empleado más motivado y productivo a la hora de trabajar.
Pero, ¿será de esta misma forma tu relación con tu jefe? Probablemente no. En este caso, suele ser diferente ya que la manera de trabajar es distinta y es por ello que se suele tener límites con la información que le das, cuándo y cuántas cosas le dices. Sin embargo, no es una situación imposible, ya que siempre y cuando sepas separar el trabajo con la amistad, podrás tener una buena relación (incluso hasta una buena amistad) con tu jefe.
Al tener una mayor confianza con tu jefe, el/ella te entenderá mejor al momento de solicitarle algún permiso, ya que sabrá del tema, estará familiarizado con la situación o por el hecho que te conoce, sabrá que no abusarías de su confianza. Recuerda no pasar de tus límites con él/ella, pues si lo haces podrías arruinar la relación de amistad y simultáneamente la profesional.
En varias ocasiones el tener una buena relación o amistad con superiores puede causar conflicto entre empleados, ya que se puede notar preferencias, beneficios o privilegios. Es por ello que nuevamente recalcamos que como profesionales se debe separar la amistad con el trabajo, ya que dentro del ámbito laboral, ambos individuos trabajar para el bien de la empresa.
Existen varios jefes que consideran que al momento de entablar una amistad con el empleado, el respeto comienza a desaparecer, que el rendimiento dentro del trabajo cambia y así también la manera de trabajar como equipo. Esto no necesariamente se da en todos los casos, como empleados se puede mostrar el profesionalismo ante el trabajo que realizas, no dejar de ser responsable ni productivo. De igual forma, en muchas ocasiones el tener una buena amistad con el jefe hace que los empleados rindan más, ya que la lealtad hacia ellos crece y así crece también el compromiso.
Si no has podido entablar una amistad con tu jefe y otros sí, NO TE PREOCUPES. No te debes frustrar ni forzar las cosas, lo importante es siempre mostrar tu profesionalismo ante todo, ganar su confianza y sobretodo su respeto.
Y tú, ¿eres amigo de tu jefe/a?
Autor: Tecoloco.com
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